viernes, abril 27, 2007

Te Quiero
Te quiero Violeta,
aún te persigo
con las afiladas aletas
del pensamiento,
por los acantilados
del desencanto,
por los desfiladeros
del espacio y del tiempo.

Pierdo a Ana en este eterno silencio,
sin rencores ni lamentos,
en una sinfonía sin instrumentos,
solo un sonido hueco, mágico e intenso:
la fantasía de imposibles momentos…

Me cobijo cielo en los besos que usamos,
su pelo, su verbo, su risa, sus manos..
Aún me quedan de nuestros sedimentos
seis poemas y tres versos:

Me abrazo a la ausencia de Violeta
y te hago y deshago Ana el amor
con la devoción del amante asceta
El Poeta de los Zapatos